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Queen -
Los Reyes se han convertido, nunca mejor dicho, en los reyes. Hace un par de días el equipo de hockey de Los Angeles Kings se han proclamado campeones de la Stanley Cup por primera vez en su
historia.Después de sus 46 años de existencia, en uno de los años en los que era menos probable que lo lograran (ni siquiera el mítico Gretzky logró llevarlos a la victoria, sí a la final), los angelinos conquistaron el título frente a los Diablos de New Jersey, que también llegaron a la final contra pronóstico. Los chicos de Darryl Sutter, y él mismo, lograron varios récord: ha sido el primer equipo en entrar en los play-off octavo clasificado y que ha ganado el título, también ha sido el que ha logrado el título con un número menor de partidos en los play-off, sólo 14 encuentros.
El MVP ha sido Jonathan Quick que ha realizado unas series impresionantes. Aquí podéis ver las estadísticas:
http://kings.nhl.com/club/player.htm?id=8471734
La verdad es que es un equipo antipático, estilo Celtics. No me gusta, pero hay que reconocer que la evolución que han hecho en los últimos años ha sido alucinante. Hace muy poquitos años era un equipo que pagaba mucho dinero en apuestas y que era seguro que perdería muchos partidos. Recibía palizas y sus partidos eran secos, lentos y poco vistosos. Hoy los partidos siguen siendo poco vistosos pero la Stanley no se gana por suerte.
Lo otro que ha hecho que la gente esté más o menos contenta ha sido la entrañable pequeñaja que se convirtió en estrella de la fiesta: la hija del MVP, el portero Quick:
Ya veremos qué sorpresas nos depara la temporada que viene. Espero que sean los Flames, y para bien.
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