ESCUCHANDO:
Edwin Starr -
El lunes, día de la mona, fuimos a casa de mi tata a llevarle la mona a los peques. Yo soy el padrino de la niña y mis tíos gallegos (en Galicia) lo son del peque, así que le llevamos también unas monas por eso de que son niños.
Las siguientes frases pueden herir la sensibilidad del lector.
La gallina fue descabezada sin compasión, siendo lo primero en desaparecer. El osito fue desorejado sin miramientos, ya que cuando nos dimos cuenta el peque ya le había arrancado, con dos certeros mordiscos, las orejas (lo podéis ver en la foto), y seguía sin parpadear mordisqueando su cabeza.
Tuvimos que esconder el conejo (la otra mona del peque) y los huevos de la gallina para que no se empachasen.
Os dejo cuatro fotos:
1 comentario:
Jo, qué buena pinta. Si un día me paso por Barna te aviso fijo. No solo para hacerte una visita, también para pegarle unos buenos bocados a una mona. Ya solo ver la foto, dan ganas de hincarle el diente. ;D.
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